Para Achatz no todo ha sido sencillo.
En julio de 2007 fue diagnosticado con
cáncer de lengua, el cual se extendía a
los nódulos linfáticos, el pronóstico era
extremadamente grave y las esperanzas
de supervivencia escasas.
Pese a todo, se sometió a un tratamiento
experimental de la Universidad de
Chicago, el cual muy probablemente le
provocaría la pérdida del sentido del
gusto.